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CRÓNICA. El Miralvalle se olvida del 'caso Rosalía' con una victoria en Pontevedra (49-60)

El Miralvalle hizo un partido muy efectivo ante el Arxil, con ventajas cómodas hasta el final del choque. LA VOZ

49. Arxil Pontevedra: Carla Fernández (6), Noelia Masía (10), Natalia López (3), Heather Forster (8), Cristina Díaz (4) -cinco inicial-, María Lago, Margarita Moreira (1), Sara Castro (7) y Samra Omerbasic (10).

60. Extremadura Miralvalle Plasencia: Sofía Ainsa (2), Alicia Morales (9), Tia Weledji (17), Princess Aghayere (14), Stacia Robertson (16) -cinco inicial-, Andrea Cueva (2), Natalia Pizarro, Celia Rodríguez y Luciana Chagas.

Parciales: 15-16, 22-34, 35-50 y 49-60.

Árbitros: Marchiano Ucelli y Martínez Covelo.

Incidencias: Pabellón de La Juventud.

Juan Carlos Ramos / El Miralvalle se resiste a dejar de soñar. El equipo placentino se sobrepuso a su semana más complicada tras la posible alineación indebida ante el Rosalía y se hizo con la victoria en la cancha del Arxil Pontevedra (49-60), en el primero de sus dos partidos este fin de semana en tierras gallegas. Este domingo se jugará muchas de sus opciones de fases de ascenso ante el Celta de Vigo (19:00).

El conjunto extremeño salió algo frío a la pista del Pabellón del CGTD. Y sin jugar sus mejores minutos, le bastaron para intercambiar canastas con un Arxil que mantuvo ventajas hasta el 13-11. Pero en el momento que se puso a jugar Stacia Robertson, y a imponer su inteligencia en la pintura, el Miralvalle no tuvo problemas para abrir brecha. Con el 18-29, y 12 puntos de Stacia, Maite Méndez trató de parar el partido, pero el guion no cambió demasiado. Con 22-34 se llegó al descanso.

El Arxil hizo amago de meterse en el partido cuando sus interiores Forster y Omerbasic salieron a la cancha con energías renovadas. El optimismo local duró hasta que Tia Weledji se puso a enchufarlas desde cuatro metros y dar una ventaja casi definitiva (28-47).

En el último cuarto, el Miralvalle entró en modo hibernación pensando en el partido de este domingo y alargó las posesiones casi hasta el límite. El Arxil lo aprovechó para ponerse a ocho a falta de cuatro minutos (45-53), lo que hizo despertar de su letargo a las placentinas para finiquitar en un par de acciones.

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