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CRÓNICA. Un Plasencia lleno de dignidad mereció mucho más ante el Moralo (1-0)

Manu Moreira, que lo intentó varias veces, trata de superar a Yoni por bajo. / JESÚS GARCÍA
Moralo CP
1
UP Plasencia
0
MORALO CP.
Miguel López, Yony, Julio Rodao, Suso, Iván Gómez, Del Castillo, Sergio Gómez, Sergio Alonso, Rubén Rivera (Paco Tomás, m.70), Alex Caramelo (Adri Nombela, m.87) y Valentín (Alex González, minuto 77).
ARROYO CP.
Sergio Moya, Belli, Edet, Juanals (Valverde, m.57), Borja Encada (Flórez, m.62), Manu Moreira, Arroyo, Pedro Gilarte, Javi López, Aarón y Kofi.
GOLES:

1-0 (m.34): Del Castillo.
ÁRBITRO:
Pavón Guillén. Mostró tarjertas amarillas a Valentín, Del Castillo y Alex González, del Moralo; y a Manu Moreira, Belli y Valverde, de la UP Plasencia.
INCIDENCIAS:
Campo Municipal, 1.200 espectadores. Minuto de silencio por el niño Julen y por Demetrio Moreno, suegro del patrocinador del club Germán González.

































Juan Carlos Ramos / Navalmoral de la Mata


Se esperaba más del Moralo y menos del Plasencia, pero al final el resultado favoreció al equipo que tiene viento a favor a estas alturas de temporada. Al igual que en el partido de la primera vuelta –con victoria unionista por 1-0-, el resultado no reflejó los merecimientos de uno y otro y los placentinos no pudieron llevarse a casa más que el orgullo henchido y la dignidad intacta a pesar de lidiar con un panorama extradeportivo tremendamente complicado. 

Unos disparan con escopeta y otros con tirachinas. Y aun así, el Plasencia sigue a un solo punto del playoff. De las salidas y llegadas que pueda haber hasta el jueves dependerán sus opciones de estar entre los cuatro primeros.

La UPP, a pesar de las limitaciones y carencias de su plantilla, demostró que puede presentar al menos un once que dé la cara. Su primera media hora en Navalmoral fue digna de elogio. Embotelló a un Moralo que salió dispuesto a hacerse con el balón, pero que no tuvo más remedio que capear el temporal ante el dominio de Pedro Gilarte y Arroyo en la parcela ancha.

Hasta tres claras tuvo la UPP para adelantarse antes del 1-0. Manu Moreira disparó desde 25 metros al larguero y el balón botó sobre la línea, Aarón no supo definir con la pierna correcta ante un Miguel López vendido y otra vez el portero tuvo que desviar a córner un disparo cruzado de Kofi.

El Moralo sí tuvo más efectividad. En su primera llegada, en el minuto 34, a la red. Córner que Sergio Gómez saca en corto para el centro de Rubén Rivera, que encuentra un cabezazo imposible de Diego del Castillo –casi llovido del cielo- que entró por la escuadra (1-0).

Ese tanto descompuso al equipo placentino y el Moralo pudo sentenciar antes del descanso. En la más clara, Sergio Moya sacó un pie espectacular en un uno contra uno de Valentín.

En la segunda parte, el Moralo se atrincheró aún más en busca de alguna contra que sí llegó, pero al que le faltó el último pase certero. Belli volvió a erigirse en el líder de la zaga para abortar los repliegues locales. La entrada de Flórez por la izquierda revitalizó el dominio placentino en la última media hora.

En ataque, al Plasencia le faltó clarividencia y, por qué no decirlo, la presencia de un nueve. Aarón las ganó toda por arriba, pero a su lado no tuvo un delantero con instinto de asesino. 

Y aun así, volvió a tener más ocasiones de gol, como en dos disparos de Manu Moreira desde la frontal y, en la más clara del partido en el minuto 88, en un disparo de Flórez, completamente solo a tres metros de Miguel López, que se fue por centímetros.

Al final, explosión de júbilo en los aficionados locales y en el banquillo verde, que acabó pidiendo la hora y reconocimiento de los muchos seguidores unionistas a su equipo por su honradez y profesionalidad. Todo ello, hay que decirlo, en el ambiente más cordial de los últimos derbis salvo hechos anecdóticos.