Pedro Gilarte y Aarón retornan a la UPP y Vitolo se marcha al Avilés

Aarón afrontará su tercera temporada con la camiseta de la UP Plasencia.

La UP Plasencia sigue inmersa en pleno proceso de recuperación de la identidad que tuvo que dejar aparcada el año pasado por motivos económicos. En la segunda parte de la temporada anterior regresó el entrenador de la penúltima plantilla, Luismi, y ahora, con plenitud de poderes deportivos, el técnico placentino se ha propuesto de rodearse de todos sus jugadores de confianza. Operación Retorno, se llama.

De momento, ya se ha hecho con siete futbolistas que tuvo bajo su mando hace dos años: los renovados Pablo Bueno y Alfonso Bernal y los fichados Sergio Moya, Héctor Riolobos, Álvaro Juanals y, los últimos en llegar, Pedro Gilarte y Aarón.

El fichaje de Pedro Gilarte se hizo oficial este lunes, días después de que el centrocampista se despidiera del Coria tras no haber disputado ni un solo minuto a causa de las lesiones. Primero pasó por quirófano por una tendinopatía rotuliana. Luego, un edema le impidió ser convocado hasta el playoff de ascenso. En Mérida, tampoco jugó.

Luismi espera recuperar la mejor versión del penúltimo capitán placentino. El propio Pedro Gilarte reconoce que se encuentra en un buen momento de forma y solo cabe ser paciente para superar por completo las pequeñas molestias que causa el edema.

Aarón Fernández jugó la pasada temporada en el Moralo tras jugar las dos anteriores en el equipo placentino. El centrocampista de 35 años es una de las grandes apuestas de Luismi, que siempre ha visto al catalán a su mano derecha dentro del campo. “Con ganas de volver a empezar un nuevo proyecto, dar las gracias a UPP y en especial a Luismi por mostrar tanto interés en trabajar otra vez juntos, intentaremos celebrar así todo lo bueno juntos”, decía Aarón en redes sociales tras anunciarse su fichaje.

El que no va a seguir en la UPP es Vitolo. El canario se marcha al Real Avilés, del grupo asturiano de Tercera División, según informa El Comercio. El último capitán placentino era uno de los grandes objetivos de la dirección deportiva unionista.