LEB Plata. El Plasencia se juega una final y el Zamora se juega la vida
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| Mario Álvarez trata de superar a Brett Ervin en el partido de pretemporada. |
Juan Carlos Ramos / Es más trascendente para el Zamora que para el Plasencia,
pues una nueva derrota podría dejar a los zamoranos al borde del precipicio: a
cinco partidos de la salvación a falta de once jornadas para acabar la liga.
Sin embargo, para el equipo placentino también tiene una importancia enorme el
encuentro que se ha de disputar en La Bombonera a partir de las 18:30 horas.
El Extremadura Plasencia lleva prácticamente dos meses a
caballo entre la zona de descenso y esa tierra de nadie a la que quedarán
relegados solo tres equipos al final de la liga regular. Ese es el objetivo que
de momento se marca el staff técnico, salir de una vez por toda de los puestos
de descenso sin pensar que dos victorias seguidas pueden auparle en la lucha
por los playoffs. "Llevamos mucho tiempo mirando abajo y quizás tenemos un
poquito de ansiedad por salir de ahí. Hay que dar confianza a los jugadores y
que se sientan apoyados por los aficionados, darles un clima de
confianza", decía Carlos Díaz en la rueda de prensa previa al partido.
Aunque reconoce que el partido es más decisivo para el
Zamora, Carlos Díaz asegura que "para nosotros también es una final y la
estamos preparando como tal".
La plantilla extremeña llega a esta importante cita en unas
condiciones casi óptimas después del parón motivado por la disputa de la Copa
LEB Plata. De los seis jugadores tocados que viajaron a Martorell, cuatro de
ellos han salido de sus lesiones y otros dos se encuentran en camino de ello.
En este sentido, Seydou Aboubacar sigue siendo mimado por los fisios.
En el Zamora, los focos estarán centrados en el placentino
Javier Cardito, que vuelve a Plasencia para medirse por primera vez en
competición oficial a su exequipo (la última vez fue en pretemporada y con
victoria zamorana). Otros que destacan son Chris Hansen (tercer máximo anotador
de la categoría), Brett Ervin (duodécimo máximo anotador), además de la
capacidad reboteadora de Christopher Iza o la versatilidad de Xavi Hernández.
"A pesar de ser colistas, Zamora ha realizado un buen
baloncesto y ha perdido muchos partidos por no saber los últimos minutos, más o
menos como nosotros. Es un equipo al que le gusta jugar con marcadores altos,
por eso tenemos que frenar a Hansen y no permitirle que haga tiros cómodos. Hay
que mantener la concentración hasta los últimos segundos de la posesión",
avisa Carlos Díaz.
