Se acaban los calificativos para hablar de la gesta que el
Plasencia está tratando de llevar a cabo. A pesar de ver diezmada su plantilla
en enero (este domingo había cuatro juveniles en el banquillo) y de no cobrar en
tiempo y forma desde hace meses, la UPP rechaza la idea de dejar de luchar por
el playoff de ascenso.
Ante el Atlético Pueblonuevo, el Plasencia ofreció
posiblemente su mayor exhibición en la presente temporada. Marcó seis goles,
que pudieron ser varios más, a un equipo que llegaba a esta cita como el sexto
menos goleado de la competición. Y a pesar de tener los tres puntos en el
bolsillo, no levantaron el pie del acelerador, sabedores de que la diferencia
de goles puede ser trascendental a final de liga.
Los primeros quince minutos no anticiparon el monólogo
unionista del resto del encuentro. El Pueblonuevo fue a buscar a su campo al
Plasencia y a los locales les costó hacerse con el dominio de balón. En cuanto
lo consiguieron, no hubo color.
Kofi abrió el fuego con un disparo que tuvo que despejar
Jesús Torres a saque de esquina. Le siguió un cabezazo de Aarón que golpeó en
el larguero.
El 1-0 era cuestión de tiempo y éste acabó llegando en el
minuto 21, tras una gran jugada de Belli hasta línea de fondo y un posterior
centro que aprovechó Javi López a pesar de la 'casi parada' de Jesús Torres.
El portero fue el mejor de los suyos y lo demostró cuando
tuvo que detener un penalti a Kofi, realizado por Manuel sobre Aarón. Era el
minuto 25.
Los de Pineda trataron de estirarse y llegar con vida al
descanso, pero todos los duelos individuales eran para los jugadores
blanquinegros. Un buen ejemplo de ello fue la jugada del 2-0, en el minuto 40.
La UPP ganó por alto hasta dos balones dentro del área visitante. El balón
suelto lo recogió Álvaro Juanals para cruzar de semichilena.
El paso por vestuarios no le sirvió al At. Pueblonuevo para
corregir errores. Volvió a caer en ellos muy pronto. En el 51, Aarón remató
hasta por dos veces un saque de esquina para hacer el 3-0.
Con los tres puntos a buen recaudo, el Plasencia comenzó a
pensar en dos cosas. Una, anotar el mayor número de goles posibles en caso de
empate a puntos con Moralo o Coria. Dos, proteger a sus apercibidos de tarjetas
amarillas.
Así llegaron el 4-0 de Pedro Gilarte tras un remate
acrobático a centro de Carlos Valverde (m.64), el 5-0 de Pedro Blanco tras una
gran arrancada de Borja Encada en su primera acción sobre el campo (m.70) y el
6-0 de Aarón en una recuperación de Luismi Redondo en línea de fondo (m.85).
Con seis jornadas por delante, el Plasencia disputará su
próxima final en Calamonte, donde el portero Sergio Moya cumplirá su segundo y
último partido de sanción.