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CRÓNICA. El Plasencia acusó la resaca copera en Azuqueca (81-74)

Rafa Sanz da instrucciones durante un tiempo muerto.

El Extremadura Plasencia ha encajado su segunda derrota de la pretemporada tras perder en la cancha del Azuqueca por 81-74. Un tropiezo, el primero ante otro equipo LEB Plata, que llega después de la victoria en la final de la Copa Extremadura.

El Plasencia se supo mover mejor cuando el encuentro transcurrió alejado de los rigores tácticos. Con fluidez ofensiva e intercambio de canastas, el equipo placentino lideró el marcador durante la primera parte con sensibles ventajas (25-27 al final del primer cuarto y 42-47 al descanso). Y todo ello a pesar de mostrar cierta fragilidad defensa y sufrir bastantes pérdidas de balón en la circulación de balón. El acierto en el tiro suplió las carencias.

Ervin Mitchel (12 puntos) e Ignacio Ballespín (10 puntos) tiraron del carro alcarreño para impedir que el Plasencia se marchara en el electrónico.

En la segunda parte, más de lo mismo. El Azuqueca hizo mucho daño desde el bloqueo directo, sobre todo sus bases. Sabían leer muy bien la jugada y conseguían llevar el balón al mejor colocado, ya fuera con tiros liberados, penetraciones o canastas debajo del aro (de penetrar y doblar al grande).

A eso se sumó que el Plasencia siguió perdiendo muchos balones que permitía al Azuqueca correr contraataques fáciles. La aparición de nuevos actores como Gullit Mukendy acabó por voltear el marcador a base de bloqueos directos y correr el campo (60-58 en el tercer cuarto).

En la otra canasta, el Plasencia siguió moviendo mal el balón porque el juego sin balón no estuvo bien. Se tomaron malas decisiones, se fallaron tiros y se perdieron aún más balones.

El Azuqueca ya no abandonó la ventaja en el resto del partido e incluso se permitió el lujo de dominar con relativa comodidad en los instantes finales. Cuando el Plasencia trataba de exprimirse en defensa, ahí aparecía Mihailo Radunovic para despejar cualquier atisbo de dudas. Con 81-74 se cerró el choque.